Una que anda por ahí: A las barricadas! Cierra las calles, abre el camino.

Oaxaca arde. Y lo hace desde hace casi cinco meses. Cinco meses de resistencia del pueblo oaxaqueño.

El 22 de mayo los docentes de Oaxaca realizaron un "plantón" en el centro de la ciudad, exigiendo, básicamente, mejoras salariales.

Pero el 14 de junio, en la madrugada, el gobernador Ulises Ruiz Ortiz no tuvo mejor idea que mandar a desalojar el plantón violentamente, generando cerca de 100 heridos, muchos detenidos e incluso personas desaparecidas, de las que aún no hay noticias.

Inmediatamente el pueblo salió a las calles a defender a los docentes y a repudiar la represión del gobierno. A partir de allí, el primer reclamo pasó a ser la renuncia del gobernador.

Tres días después, más de 350 organizaciones sindicales, políticas y sociales conformaron la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) que, desde entonces, está de hecho a cargo del gobierno, aún cuando Ruiz Ortiz todavía no ha renunciado y el ejecutivo nacional no parece tener intenciones de relevarlo de su cargo.

El pueblo tomó la ciudad. Barricadas en cada calle, bloqueo de rutas, toma de edificios públicos y juzgados. Y frente a cada intento de represión refuerza su presencia en las calles.

La APPO organizó la ciudad: la seguridad, la vialidad, el transporte público, la limpieza. Y continua resistiendo a cada nuevo embate de la Policía Federal Preventiva (PFP). Y planean extender esta organización a otras ciudades y otros estados mexicanos.

En todo este proceso hay que destacar el aporte de las comunidades indígenas respecto de su larga tradición autonómica; los grupos organizados de mujeres que incluso llegaron a tomar un canal de televisión; y, por supuesto, la vital importancia que tienen en este proceso los medios alternativos de comunicación, sobre todo la radio.

Los grandes medios de comunicación (Televisa y TV Azteca) son funcionales al gobierno de Vicente Fox y de Ulises Ruiz Ortiz. Y para romper el cerco informativo nada mejor que la comunicación propia.

El otro factor para fortalecer la resistencia es la solidaridad y el apoyo al pueblo oaxaqueño. Se realizaron marchas en muchos lugares del mundo denunciando la represión. En varias ciudades mexicanas ya están naciendo asambleas. El EZLN y La Otra Campaña brindaron su apoyo y se están organizando plenarios regionales para organizarse.

El Estado de Oaxaca

Oaxaca, junto a Chiapas y Guerrero, es uno de los estados más pobres de Mexico, con gran cantidad de comunidades indígenas.

Desde hace 80 años es gobernado por el PRI. Pero en las últimas elecciones de julio pasado ganó el "izquierdista" Partido de la Revolución Democrática (PRD). Recordemos que en esas elecciones, a nivel nacional, se denunció un enorme fraude. Oficialmente ganó Felipe Calderón, del Partido de Acción Nacional (PAN, el mismo del actual presidente, Vicente Fox) frente a Andrés Manuel Lopez Obrador, del PRD.

Frente al nivel de la crisis en Oaxaca, la gran pregunta es por qué el ejecutivo mexicano no dezplaza a Ulises Ruiz Ortiz. La respuesta es sencilla: están esperando. Sucede que según la constitución oaxaqueña, si el gobernador renuncia antes de los dos años de mandato, en su lugar debe asumir el primer senador federal del estado y convocar a nuevas elecciones. Ese puesto hoy lo ocupa el PRD. El plazo se vence en diciembre. Luego, la constitución estipula que quien definirá al sucesor será el partido de gobierno. Así, el PRI y el PAN se aliaron para sostener al gobernador, por lo menos hasta diciembre, para que el poder no se vaya de sus manos.

Esa es la salida "democrática". Pero se teme, frente al gran desplazamiento constante de fuerzas de la PFP, la policía y el Ejército, enviadas directamente por el presidente Fox, que todo intente terminarse a través de más represión.

El pueblo de Oaxaca debe continuar con la lucha y la resistencia.